El té es una de las bebidas más consumidas en el mundo, con una historia que se remonta a miles de años. Es importante destacar la diferencia entre el té y una infusión. Mientras que el té se obtiene exclusivamente de las hojas de la planta Camellia sinensis, las infusiones se elaboran a partir de otras hierbas, flores, frutas o especias, y no contienen hojas de té propiamente dichas. Por ejemplo, la manzanilla, la menta y el rooibos son infusiones, no tés, aunque popularmente se les denomine “tés”.
Según la leyenda, el té fue descubierto hace más de 5.000 años por el emperador chino Shen Nong, cuando unas hojas de Camellia sinensis cayeron accidentalmente en una olla de agua caliente. Fascinado por el aroma y el sabor de esta infusión, Shen Nong inició lo que se convertiría en una tradición milenaria en la cultura china y, eventualmente, en todo el mundo.
Se obtiene a partir de las hojas de la planta Camellia sinensis, y su preparación y consumo se han convertido en una parte fundamental de muchas culturas alrededor del mundo. La diversidad de tipos de té, así como las distintas formas en que se cultiva y procesa, han dado lugar a una amplia variedad de sabores, aromas y experiencias.
Los Seis Tipos de Té: Una Familia Diversa
Aunque existen cientos, si no miles, de variedades de té, todos se agrupan en seis tipos principales, basados en la forma en que se procesan las hojas después de la cosecha. A continuación, se describen los seis tipos principales de té:
Té Verde
- Proceso: Las hojas de té verde se recolectan y se someten a un proceso rápido de calentamiento para detener la oxidación. Este método conserva el color verde de las hojas y el perfil de sabor fresco y vegetal.
- Sabor y Aroma: El té verde es conocido por su sabor fresco, suave y ligeramente herbal, con un aroma que puede variar desde notas florales hasta vegetales.
- Beneficios: Rico en antioxidantes, el té verde es valorado por sus potenciales beneficios para la salud, incluyendo la mejora de la función cerebral y la quema de grasa.
Té Blanco
- Proceso: El té blanco es el menos procesado de todos los tipos de té. Se elabora con brotes jóvenes y hojas que se secan al sol o en condiciones controladas.
- Sabor y Aroma: Tiene un sabor muy suave y delicado, a menudo descrito como dulce y floral, con un aroma ligero y fresco.
- Beneficios: Al ser mínimamente procesado, retiene una alta concentración de antioxidantes y se cree que tiene propiedades antiinflamatorias.
Té Negro
- Proceso: Las hojas de té negro se marchitan, se enrollan y luego se dejan oxidar completamente antes de secarlas. Este proceso de oxidación es lo que le da su color oscuro característico.
- Sabor y Aroma: El té negro tiene un sabor fuerte y robusto, con notas que pueden variar desde maltosas hasta afrutadas y especiadas, dependiendo de la región de cultivo.
- Nota Cultural: En China, este tipo de té se conoce como “té rojo” (hong cha), debido al color rojizo de la infusión. Es solo en Occidente donde se le denomina “té negro”.
- Beneficios: Conocido por su contenido más alto de cafeína entre los tés, el té negro puede mejorar la alerta mental y tiene propiedades antioxidantes.
Té Oolong
- Proceso: El té oolong se encuentra en un punto intermedio entre el té verde y el té negro. Las hojas se oxidan parcialmente antes de ser secadas, lo que resulta en una amplia variedad de sabores según el nivel de oxidación.
- Sabor y Aroma: Los tés oolong pueden tener un perfil de sabor muy diverso, desde floral y afrutado hasta tostado y cremoso.
- Beneficios: Se cree que el té oolong ayuda en la digestión y puede promover la pérdida de peso al aumentar el metabolismo.
Té Amarillo
- Proceso: Similar al té verde, pero con un paso adicional de “encapuchado” o “envuelto” donde las hojas se secan lentamente, lo que le da un color amarillo distintivo y un sabor más suave.
- Sabor y Aroma: El té amarillo tiene un sabor más suave y menos vegetal que el té verde, con un perfil más dulce y cremoso.
- Beneficios: Al igual que el té verde, el té amarillo es rico en antioxidantes y se asocia con beneficios para la salud cardiovascular.
Té Post-Fermentado (Té Oscuro)
- Proceso: Este tipo de té se fermenta y envejece durante un período prolongado, lo que le da un sabor terroso y profundo. Dentro de esta categoría se encuentra el famoso té pu-erh, que puede ser crudo (sin fermentar) o cocido (fermentado).
- Sabor y Aroma: El té post-fermentado tiene un sabor profundo, terroso y a menudo adquiere matices más complejos a medida que envejece.
- Beneficios: Se le atribuyen propiedades digestivas y se cree que ayuda a reducir los niveles de colesterol.
El té no es solo una bebida; es una experiencia que varía enormemente dependiendo de su tipo, la región donde se cultivó, y cómo se prepara y sirve. Esta variedad, junto con su rica historia y sus reconocidos beneficios para la salud, hace que el té sea más que una simple taza caliente; es un viaje sensorial y un puente entre culturas. Así que la próxima vez que te prepares una taza, recuerda que estás participando en una tradición milenaria que une a personas de todo el mundo.